Vigilancia veterinaria de resistencias a antibioticos

VIGILANCIA VETERINARIA DE RESISTENCIAS A ANTIBIÓTICOS

 

Dr. D. Miguel A. Moreno y Dr. D. Lucas Domínguez

Departamento de Patologia Animal I (Sanidad Animal)

Facultad de Veterinaria, Universidad Complutense

 

 

            Elinforme del Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de los EstadosUnidos de América titulado ?Prevención de la emergencia de enfermedadesinfecciosas. Estrategias para el siglo XXI? propone una relación de nueve temasprioritarios entre los que se encuentran la seguridad alimentaria, lasinfecciones oportunistas, la salud de embarazadas, recién nacidos, viajantes yrefugiados, las vacunas, la seguridad de las transfusiones y la resistenciaantimicrobiana.

 

            Coincidepor tanto esta Mesa Redonda sobre ?Emergencias infecciosas como problemaactual?, que se enmarca en el programa de actos de la Real Academia de CienciasVeterinarias en la celebración de su XXV Aniversario, en la identificación deuno de los problemas de salud pública que mayor repercusión está teniendo en elmomento actual.

 

            Vigilanciaes, en sentido sanitario y adaptando una definición de nuevo del CDC, ?Larecogida, análisis, interpretación y diseminación de forma sistemática ycontinua de datos de salud con los objetivos de conocer los modelos deocurrencia, prevenir su aparición o detectarla precozmente, planificar yevaluar programas de salud y valorar su impacto?.

 

            Siaplicamos este concepto al campo de las resistencias de las bacterias  a los antibióticos, nos encontramos conamplio programa de trabajo destinado a proteger el arsenal terapéuticoexistente para combatir las enfermedades de origen bacteriano.

 

            Actualmente,es fácil establecer una relación de bacterias para las cuales el número deantimicrobianos útiles ha disminuido drásticamente. ¿Cómo es posible que sehaya llegado a esta situación y qué tiene que ver con ella el uso deantibióticos en animales?. Y lo que es más importante,  ¿qué se puede hacer para reconducir estasituación?.

 

            Todoshemos oído hablar de las ?balas mágicas? como expresión referida a laspropiedades ?milagrosas? de las sulfamidas y posteriormente de la penicilina.La toxicidad selectiva de estos agentes, naturales o de síntesis, que no actúansobre las células eucariotas, ya sean humanas o animales, y dañan en cambio alas bacterias, parecía ser un excelente augurio de que permitirían acabarrápidamente con las bacterias patógenas. Sin embargo, pronto se comprobó quelas bacterias llevaban muchos siglos adaptándose a los cambios en su ambiente yque la aparición de los antibióticos no era más que un nuevo factor que añadira la lista de los cambios ambientales.

 

            Enlas bacterias prima la colectividad frente al individuo y por ello, comorecogen las teorías actuales que tratan de explicar su rápida adaptación acualquier cambio, ante una situación de estrés se ven favorecidos losmecanismos que aumentan la variabilidad y por lo tanto la aparición de algúnindividuo que ?haya encontrado? una solución para sobrevivir al cambio y poderperpetuarse. En el campo de la utilización de antibióticos esta adaptación  se ha concretado en la aparición crecientede bacterias (clones) dotadas de mecanismos que les permiten evadir, con éxito,la acción de los antibióticos.

 

            Lasegunda pregunta que nos planteábamos es qué tiene que ver el uso de antibióticosen animales con esta situación. El empleo de antibióticos en animales plantea,inicialmente, la misma situación ecológica que en el hombre; es decir, seejerce una presión selectiva y por lo tanto también se seleccionan lasbacterias mejor adaptadas (resistentes). A partir de aquí se inicia un largocamino que, eventualmente, puede llegar a la aparición de una infección humanaproducida por una bacteria o ligada a un gen de resistencia seleccionado con eluso de antibióticos en animales.

 

            Trasesta formulación genérica, que evidentemente no es cuestionable, se abre uninmenso campo vacío, ya que apenas existen datos que permitan cuantificar ?laaportación veterinaria? a este problema de salud pública.

 

            Podemosvolver ahora al principio de nuestra exposición, cuando recordábamos losdistintos aspectos del concepto de vigilancia, para señalar que las redesveterinarias de vigilancia son, precisamente, instrumentos que deben ayudar allenar ese campo que de momento se encuentra casi yermo.

 

            Antesde intentar profundizar en los aspectos de mayor interés de estas redes, esnecesario dejar clara la idea de que, por sí solas, no pueden abordar todas lasdimensiones de la vigilancia, y que por lo tanto su esfuerzo puede ser baldíosi no va acompañado de las acciones de los organismos, públicos y privados, quepueden poner en marcha las medidas que se derivan de los resultados obtenidospor las redes de vigilancia.

 

             ¿Qué se debe pedir a una red de vigilanciaveterinaria?. En los últimos tres o cuatro años se han multiplicado los forosen los que se han debatido todos los aspectos posibles relacionados con estetema y podemos emplear el resumen que recientemente ha presentado el Dr.Jean-Louis Martel (Director del Laboratorio de Patología Bovina, AFSSA, Lyon)en la última reunión de una Acción Concertada Europea que discute este tema:orientar la terapéutica veterinaria, detectar la aparición de clones deresistencia e identificar factores de riesgo.

 

            La primera ventaja directa, para losveterinarios, se encuentra en la ayuda que prestan los datos de las redes paraestablecer las terapéuticas empíricas. No hace falta decir que en muchos casosno es posible esperar, para instaurar un tratamiento, a que se reciban losresultados del laboratorio, pero sí que puede ser que el tratamiento másadecuado no sea el mismo en todas las explotaciones o zonas geográficas. Losdatos locales, de una red, de vigilancia son los que permiten adecuarcontinuamente los tratamientos empíricos, a los niveles de resistencia delpropio entorno, aumentando el éxito terapéutico sin incrementar la presiónselectiva.

 

            Esteprimer objetivo nos permite empezar a destacar las diferencias que existenentre los ámbitos humano y animal. En el campo médico, uno de los problemasemergentes es la disminución de la eficacia de la penicilina para tratardiversos tipos de procesos respiratorios asociados con estreptococos. Puesbien, como se desprende de los resultados preliminares obtenidos en lacolaboración entre la “Red de Vigilancia Veterinaria de Resistencias aAntibióticos (VAV)” y el Grupo de Mastitis de nuestro laboratorio, losestafilococos animales mantienen un alto grado de susceptibilidad ante lapenicilina, hecho prácticamente impensable en los estafilococos humanos.

 

            Elsegundo de los objetivos formulados por el Dr. Martel, la detección de nuevospatrones de resistencia o de su diseminación, puede también ilustrarse conalgunos ejemplos.

 

            Losdatos de la Red VAV, como los de otros investigadores, muestran que lautilización de una quinolona de primera generación, como es el caso del ácidonalidíxico, sirve perfectamente para vigilar y predecir el comportamiento delos microorganismos frente a las fluoroquinolonas, que son, en la actualidad,uno de los grupos que mayor necesidad tienen de salvaguarda de su eficacia.

 

            Unsegundo ejemplo, ya cláo en la eratura, es el de la Red francesa dean RESABO, que en 1984 alertó sobre la apa