
20 Mar LA REAL ACADEMIA DE CIENCIAS VETERINARIAS DE ESPAÑA ANTE EL FALLECIMIENTO DEL EXCMO. SR. DR. D. RAÚL CASAS OLASCOAGA
Tenemos el sentimiento de comunicarles el reciente fallecimiento del Dr. D. Raúl Casas Olascoaga, miembro de número de la Academia Nacional de Veterinaria de Uruguay.
El Dr. Casas Olascoaga era Académico Correspondiente Extranjero de la Real Academia de Ciencias Veterinarias de España, y también de la Real Academia de Doctores de España (DEP)
Les informamos que el Dr. Casas intervino activamente en el primer encuentro científico de la Asociación Iberoamericana de Academias de Ciencias Veterinarias (AIACIVET) celebrado en Madrid en el año 2011. Colaboró muy activamente en la constitución de la Asociación Iberoamericana y también en la redacción de las conclusiones de este primer encuentro científico.
El Dr. Alberto Cirio, presidente de la Academia Nacional de Ciencias Veterinarias de Uruguay nos hace llegar la siguiente nota:
Ante la reciente pérdida irreparable del Dr. Raúl Casas Olascoaga, la Academia Nacional de Veterinaria del Uruguay ha entendido necesario difundir públicamente los aspectos más salientes de su brillante trayectoria como profesional veterinario y como persona, con la profunda convicción que dejó un valioso aporte a su país y un inquebrantable legado a la profesión veterinaria.
De su profusa y dilatada trayectoria como veterinario destacamos inicialmente su labor docente como Profesor en la Facultad de Veterinaria de Uruguay, su calificada actuación en el sector en investigación y producción de vacunas en el Laboratorio Cooper, su impronta en el Ministerio de Ganadería para la ejecución en la Cuenca Lechera del programa de ̈leche calificada ̈ que, sobre la base de un sobreprecio diferencial del litro de leche, significó un gran avance en la infraestructura para la higiene de los tambos y los programas sanitarios de enfermedades zoonóticas de alta prevalencia como Brucelosis,
Tuberculosis e Hidatidosis. Ya en la década de los 70 inicia su trayectoria internacional como Director del Centro Panamericano de Zoonosis-CEPANZO de la OPS en Buenos Aires. En 1976 es nombrado Director del Centro Panamericano de Fiebre Aftosa- PANAFTOSA-OPS en Duque de Caxias (Rio de Janeiro, Brasil), donde volcó todo su esfuerzo y experiencia a lograr avanzar y consolidar los programas de Lucha y Prevención Contra la Aftosa en America. Publicó un libro sobre la Fiebre Aftosa donde expuso todos sus conocimientos y experiencia sobre esta enfermedad. Por lo valioso de su contenido es realmente una guía de excelencia para profesionales veterinarios.
En ocasión de celebrarse los 70 años de la creación de PANAFTOSA, la Academia Nacional de Veterinaria le hizo llegar su reconocimiento a la brillante labor como Director de esa Institución que tanto ha aportado a la Salud Animal, específicamente en los programas de Fiebre Aftosa de los países de América.
Ante un justo y merecido reconocimiento a lo realizado por PANAFTOSA desde 1951 en materia de investigación, desarrollo de métodos de diagnóstico, producción y control de vacunas, epidemiología, asesoramiento de las campañas y formación de recursos humanos en los programas de Fiebre Aftosa, actualmente se ha logrado el reconocimiento internacional de la casi totalidad de los países de América del Sur –macro región históricamente endémica- como libres de la enfermedad.
Es de estricta justicia valorar y reconocer hoy, ante estos grandes logros obtenidos, que bajo su orientación como Director de los años 76 al 92 se realizaron avances de importancia crítica en la lucha contra la Fiebre Aftosa, citando como ejemplo la concreción del mapa de los Ecosistemas de la enfermedad en Sudamérica, efectuado por técnicos de los propios países, con la orientación técnica de los consultores de PANAFTOSA, en el marco del primer Programa Hemisférico de Control y Erradicación de la Fiebre Aftosa- PHEFA. Esto, junto con el desarrollo de la vacuna de adyuvante oleoso en los laboratorios del Centro PANAMERICANO, viabilizó estrategias muy exitosas en el control de la enfermedad en las áreas endémicas.
De esta etapa de su carrera destacamos muy especialmente que bajo su lideranza y orientación se construyó, con los Ministros de Agricultura de Argentina, Brasil y Uruguay, con OPS el Convenio para el Control y Erradicación de la Fiebre Aftosa en la Cuenca del Plata, algo inédito en materia de convenios sanitarios celebrados entre países, que en sentido literal ̈abrieron sus fronteras ̈ en un área productiva común para coordinar la lucha anti-aftosa. Dicho Convenio fue suscrito por los Presidentes de esos países y el Director de OPS.
El Dr. Casas batalló incansablemente para institucionalizar a la Comisión Sudamericana de Lucha Contra la Fiebre Aftosa-COSALFA, fundada en 1972, con el principal objetivo del seguimiento e intercambio de los resultados obtenidos en la ejecución de los programas anuales de Fiebre Aftosa y de realizar reuniones en forma extraordinaria cuando situaciones de epidemia de la enfermedad lo requerían. Se logró su reconocimiento por las cancillerías de los países sudamericanos y un funcionamiento ininterrumpido a través de la realización de 49 reuniones anuales de la Comisión, integrada por representantes oficiales de los Servicios Veterinarios y privados de las
organizaciones de productores de 13 países de Sudamérica y Panamá desde el año 2013. Con esta modalidad de participación del sector privado se fueron logrando y consolidando los mayores avances de los programas de Fiebre Aftosa.
Es también necesario destacar que América es el único continente en el mundo- donde hay aún en torno a 100 países no libres de Fiebre Aftosa- que tiene en el PHEFA un programa que abarca toda su superficie y PANAFTOSA es quien ha llevado adelante con éxito la secretaría técnica del mismo, siendo los sucesivos directores de este organismo actores clave para su ejecución exitosa.
Corresponde ahora referirnos a lo que fue nuestro querido Raúl como persona. Detrás de su apariencia circunspecta, su hablar lento y pausado, su tenacidad para defender lo que entendía justo, había un ser afable, franco, directo, sincero y muy persistente en sus ideas. De acuerdo con ellas exigía seriedad ética y compromiso de parte de sus pares, pero como contrapartida era muy afable y distendido con quienes trataba cotidianamente, le divertían sobre todo las anécdotas ocurrentes. Fue un gestor activo de Sociedades Científicas, como es nuestra Academia, la cual presidió y dinamizó sobretodo en el relacionamiento con otras academias nacionales y de los países vecinos. Siempre tendió en toda su trayectoria al trabajo en equipo, en lo docente y en las instituciones de las cuales fue Director. No podríamos completar esta reseña de su personalidad sin mencionar que fue muy solidario con quienes, en difíciles momentos como los que vivió nuestro pais en los años de dictadura militar, debieron partir al exilio y necesitaron su ayuda, que les brindó sin discriminación alguna.
Las enseñanzas del Dr. Casas Olascoaga, su conocimiento y sus valores éticos brindados generosamente, la llama que encendió en sus alumnos y colegas, han quedado en sucesivas generaciones y en la propia Academia Nacional de Veterinaria. Raúl ha sido, es y será un referente en el cual apoyarse para la construcción colectiva de una sociedad más justa. Creemos, en base a esta semblanza de su obra, trayectoria y personalidad, de su invalorable aporte al país y al continente, aparte de ser un referente internacional de las ciencias veterinarias, que la imagen del Dr. Raúl Casas Olascoaga debe tener una gran difusión y un merecido reconocimiento público.